La nada, simple y compleja, corriente y atemorizarte al mismo tiempo. Pensar en ella provoca vacío y dolor, lagrimas tratando de correr por nuestras mejillas, por eso tratamos de ahuyentarla pensando en cualquier cosa insignificante.
Cuando nos preguntan en que estamos pensando y respondemos con la sencilla palabra NADA, no estamos haciendo otra cosa que mentir. Es imposible para na persona que esta rodeada de tantas estimulaciones no pensar en nada. Por eso la palabra nada tiene una compañera que aunque muchas personas tienen un gran temor en aceptar que la relación existe y es real, MUERTE.
De eso me escapo, paso tras paso, lagrima tras lag